Terapia de pareja: ¿Sirve de algo ir a terapia?
Esta es una pregunta que se hacen la mayoría de las parejas que acuden por primera vez a consulta. Algunos piensan que un tercero, el cual no conoce cómo es la relación, no puede ayudarle a solventar los problemas. Pero al acudir a terapia no se encuentran a un tercero sino a un profesional formado para analizar la situación, ver el por qué de la misma y enseñar a ambos miembros de la pareja a tomar el camino para continuar.
Nuestra experiencia nos ha mostrado que muchas de las parejas que acuden ya están muy “quemadas” y han dejado pasar demasiado tiempo para ver qué pasa o si las cosas se arreglan por sí solas. ¿Dejarías que si te encuentras mal físicamente pasar mucho tiempo a ver si se pasa? El hecho de esperar a que pase el tiempo a ver si la solución llega hace que el problema se cronifique o que el ambiente se vuelva negativo y cualquier cosa que ocurra se perciba de manera amenazante. Cuando esto ocurre lleva a que cualquier tema de conversación o momento se convierta en una discusión.
En terapia los profesionales detectan la base del problema y establecen estrategias para la mejora de la situación vivida y que esta no se repita en el tiempo. Ambos miembros se escuchan, cosa que resulta difícil estando los dos solos, y aprenden a escucharse y respetarse en la comunicación. En todos los problemas de pareja ambos miembros tienen parte de responsabilidad en la situación y darse cuenta de cuál es de cada uno, mejora el problema.
Pero la terapia no sólo sirve para intentar mejorar la relación sino también para que en caso de ruptura esta sea lo menos dolorosa posible. Sirve para poder llegar a acuerdos y que el conflicto conlleve las menores consecuencias negativas posibles.
Belén Pozo
Psicóloga