No sé cómo hablar con mi hijo con TDAH
Cuando un niño recibe un diagnóstico de TDAH, en la familia surgen dudas. Esto los lleva a preguntarse qué va a pasar. Será capaz de tener los conocimientos necesarios para llevar el ritmo de la clase. Siempre será así, en qué otros aspectos le afectarán.
Estas mismas dudas que aparecen a padres. También les va a afectar a los niños ya que son los principales implicados en esto. Y es muy importante que se tenga un apego seguro y una comunicación buena con él. De este modo, para poder solucionar las dudas o inquietudes que él tenga. Y darle así, la seguridad de que siempre se va a hacer todo lo posible para ayudarle y apoyarle.
Los padres son los referentes y los modelos para seguir de los hijos.
Por ello adoptar una actitud calmada, dialogante y comunicativa será fundamental. La comunicación con él debe ser pausada, adaptada a su comprensión.
En resumen, no hay que olvidar que la familia es la vía para conocer el mundo y para conocerse a sí mismo. Es decir, a partir de ella el niño generará conceptos del mundo exterior y autoconceptos.
¿Qué frases evitar?
- “No llores”, “no grites”, “no te enfades”.
- “Te vas a caer”, “ten cuidado”, “no toques eso”.
- “Te lo he dicho mil veces”.
De estas expresiones el niño entenderá que no puede expresar sus sentimientos, que es malo o se porta mal y comenzará a tener una percepción de si mismo negativa. Además, la intervención “te lo he dicho mil veces” trae como consecuencia la idea de que no es capaz de entender lo que se le explica y dudará de sí mismo.
¿Qué decir en su lugar?
- “¿Estás enfadado?” “¿Estás triste?” “¿Por qué estás llorando?” “Es normal que estés triste/enfadado…”
- “Hay que pensar antes de actuar y estar atentos”. “Cuídate”.
- “Lo puedes hacer”, “confío en que esta vez te acordarás”
Paula Ágreda
Logopeda
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