Cómo mejorar su atención
La atención es la base de muchos de los éxitos, tanto académicos como laborales. Pero es difícil que presten atención ¿verdad?. Parece a veces como sino escucharan, ni siquiera nos miran a los ojos. Entonces mi hijo ¿tiene un problema de atención?. Estas son algunas de las preguntas que se hacen muchos padres ante los despistes de sus hijos. O ante la dificultad de mantenerse sentado haciendo la tarea. Eso si, pueden ver una película que les gusta sentados y atentos durante dos horas, pero esto tiene una explicación neuropsicológica.
Cuando algo les gusta o les motiva el sistema límbico entra en acción y regula la atención, la mantiene activa, por eso pueden estar horas y horas haciendo algo que les guste.
Lo primero de todo es descartar un problema atencional o trastorno con un psicólogo infantil. Este te realizará una entrevista y administrará pruebas objetivas al niño o niña. Pero una vez descartado o no el posible problema de atención o no, siempre se puede hacer algo desde casa para ayudar a que este área cognitiva madure lo antes posible o se desarrolle.
A continuación os recomendamos algunas formas y pautas para entrenar su atención. Desde rutinas sencillas a juegos que podéis ver en nuestro curso para padres para ver en casa realizado por la psicóloga y neuropsicólogo Elisa Vaca.
Cómo mejorar la Atención en los estudios
Trucos para mejorar la atención de tu hijo en casa: estrategias efectivas y consejos de un psicólogo infantil
La atención es una habilidad fundamental para el aprendizaje y el desarrollo de los niños. Sin embargo, en un mundo lleno de distracciones como pantallas, ruidos y horarios agitados, es común que muchos pequeños tengan dificultades para concentrarse. Como padre o madre, puedes implementar estrategias efectivas en casa para ayudar a tu hijo a desarrollar su capacidad de atención. En este artículo, exploraremos técnicas prácticas y cómo el apoyo de un psicólogo infantil puede ser clave en este proceso.
¿Por qué algunos niños tienen dificultades para prestar atención?
La capacidad de atención de un niño depende de su etapa de desarrollo, su entorno y factores individuales como la personalidad y el nivel de energía. Es importante entender que tener problemas para concentrarse no siempre es un signo de un trastorno subyacente. Sin embargo, estas dificultades pueden deberse a:
- Falta de estructura o rutinas: Los niños necesitan un entorno predecible para concentrarse mejor.
- Distracciones en el hogar: Las pantallas, los ruidos y otros estímulos pueden hacer que les resulte difícil enfocarse.
- Altos niveles de energía: Algunos niños tienen más energía y necesitan moverse antes de concentrarse.
- Problemas emocionales o estrés: Las tensiones familiares o escolares pueden afectar la atención.
- Condiciones médicas o neurológicas: En algunos casos, la dificultad para concentrarse puede estar relacionada con el TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad) u otros desafíos que requieren evaluación profesional de un psicólogo infantil.
Si las dificultades persisten o interfieren significativamente en el aprendizaje o las relaciones de tu hijo, es importante buscar ayuda profesional para identificar las causas subyacentes.
Trucos efectivos para mejorar la atención de tu hijo en casa
A continuación, te presentamos estrategias prácticas que puedes implementar para ayudar a tu hijo a desarrollar su capacidad de atención:
1. Crea un ambiente libre de distracciones
El entorno juega un papel crucial en la atención. Asegúrate de que el lugar donde tu hijo realiza sus tareas o actividades sea tranquilo y organizado. Evita tener dispositivos electrónicos como televisores o teléfonos cerca, ya que pueden desviar su atención.
2. Establece rutinas diarias
Los niños responden bien a las rutinas, ya que les proporcionan estructura y predictibilidad. Establece horarios fijos para actividades como hacer la tarea, jugar y comer. Esto ayuda a que el cerebro del niño asocie ciertos momentos del día con concentración.
3. Divide las tareas en partes pequeñas
Si tu hijo se siente abrumado con una tarea grande, divídela en partes más pequeñas y manejables. Por ejemplo, si tiene que leer un capítulo de un libro, pídele que lea una página a la vez y luego haga una pausa breve.
4. Usa técnicas de refuerzo positivo
Recompensa los esfuerzos de tu hijo cuando se concentre en una tarea, incluso si es por poco tiempo. Un simple elogio como “¡Lo hiciste muy bien concentrándote en esto!” puede motivarlo a seguir intentándolo. Un psicólogo infantil puede ayudarte a implementar sistemas de refuerzo positivo personalizados según las necesidades de tu hijo.
5. Fomenta el juego activo y los descansos regulares
Los niños tienen mucha energía y necesitan moverse para poder concentrarse después. Incluye momentos de actividad física durante el día, como correr, saltar o bailar. Además, permite descansos cortos entre actividades que requieran concentración.
6. Introduce juegos que desarrollen la atención
Existen numerosos juegos que pueden ayudar a mejorar la atención de tu hijo mientras se divierte. Algunos ejemplos son:
- Juegos de memoria, como “Memory” o “Simon”.
- Rompecabezas.
- Buscar diferencias en imágenes.
- Juegos de construcción, como bloques o LEGO.
7. Enséñale a establecer metas claras
Ayuda a tu hijo a entender qué debe lograr en cada actividad. Por ejemplo, si está haciendo la tarea, establece metas pequeñas y específicas como “Escribe estas tres oraciones antes de tomar un descanso”.
8. Trabaja en la respiración y la relajación
Enseñar técnicas de respiración profunda puede ser útil para calmar la mente y mejorar la concentración. Practica ejercicios de respiración con tu hijo antes de comenzar una tarea que requiera atención.
9. Dale responsabilidades en casa
Asignar pequeñas tareas domésticas, como poner la mesa o recoger juguetes, puede ayudar a desarrollar su capacidad para concentrarse y completar actividades. Asegúrate de que estas tareas sean adecuadas para su edad y nivel de desarrollo.
10. Limita el tiempo de pantalla
El uso excesivo de dispositivos electrónicos puede afectar la atención de los niños. Establece límites claros para el tiempo que tu hijo pasa frente a pantallas y fomenta actividades sin tecnología, como la lectura o el juego creativo.
El papel de un psicólogo infantil en la mejora de la atención
En algunos casos, las estrategias en casa pueden no ser suficientes para resolver las dificultades de atención. Aquí es donde el apoyo de un psicólogo infantil se vuelve fundamental. Estos profesionales están capacitados para identificar las causas subyacentes de los problemas de atención y diseñar planes de intervención personalizados.
Un psicólogo infantil puede:
- Evaluar las necesidades del niño: Identificar si las dificultades de atención están relacionadas con factores emocionales, de aprendizaje o neurológicos.
- Desarrollar estrategias personalizadas: Proporcionar herramientas específicas para mejorar la atención, adaptadas a la personalidad y necesidades del niño.
- Trabajar en la autoestima: Ayudar al niño a superar frustraciones y reforzar su confianza en sus habilidades.
- Orientar a los padres: Ofrecer consejos prácticos para implementar en casa y mejorar la dinámica familiar.
Si sospechas que tu hijo podría tener TDAH u otra condición que afecta su atención, un psicólogo infantil puede ser el primer paso para obtener un diagnóstico y el apoyo adecuado.
¿Cuándo buscar ayuda profesional?
Es importante considerar buscar la ayuda de un psicólogo infantil si:
- Las dificultades de atención persisten durante más de seis meses.
- Interfieren significativamente con el aprendizaje, las relaciones sociales o las actividades diarias.
- Tu hijo muestra signos de frustración, ansiedad o baja autoestima relacionados con su capacidad para concentrarse.
- Hay antecedentes familiares de problemas de atención o trastornos del aprendizaje.
Un diagnóstico temprano y un plan de intervención adecuado pueden marcar una gran diferencia en el desarrollo y bienestar de tu hijo.
Conclusión
Ayudar a un niño a mejorar su atención en casa puede ser un desafío, pero también una oportunidad para fortalecer su desarrollo y su confianza. Con las estrategias adecuadas, como la creación de rutinas, la reducción de distracciones y el uso de técnicas de refuerzo positivo, puedes apoyar a tu hijo en este proceso.
Sin embargo, si las dificultades persisten o afectan su calidad de vida, buscar el apoyo de un psicólogo infantil es esencial. Estos profesionales pueden ofrecer una evaluación integral y estrategias personalizadas que beneficiarán tanto a tu hijo como a toda la familia.
Recuerda que cada niño es único y que con paciencia, comprensión y las herramientas correctas, es posible ayudarlo a desarrollar su capacidad de atención y a alcanzar su máximo potencial.
Cómo mejorar la atención ideas desde nuestro centro de psicología infantil
- Una de las cosas más importante es el orden en el entorno. Es muy importante que su cuarto esté recogido y organizado. No sirve que no haya juguetes, sino que cada uno tenga su sitio.
- Hablarle cuando estemos a su lado. En el día a día, en ocasiones cometemos el error de hablarles desde otra habitación, y eso favorece que no nos presten atención. Ya que no sabemos lo que están haciendo. Y sea lo que sea su atención está en la actividad que está realizando. Del mismo modo nosotros le pediremos que haga lo mismo cuando nos pidan algo. Que estén a nuestro lado y nos miren a los ojos al hacerlo.
- Jugar a buscar una letra en una historia o cuento, a ser posible en una revista para que se pueda marcar. Podemos hacerlo a la vez con ellos, y ganará quien encuentre más /b/, más /p/ o más palabras que acaben en /aba/.
- A la hora de hacer la tarea debe de tener en su campo visual sólo lo que necesite. No más materiales ni distractores.
- Tener un planing semanal de las tareas y actividades a realizar. Eso favorece que su mente se centre y esté organizada. Además favorece la autonomía, ya que será el o ella los encargados de decir qué viene a continuación.
- Jugar al memori o a la búsqueda de los tesoros. En este último juego el niño de una lista que hagamos tendrá que encontrar objetos por la casa. En un primer momento los objetos pueden traerse según los vaya encontrando para finalmente que sean encontrados en orden.
En las edades en las que los procesos atencionales aún no están muy definidos es muy importante redirigir la atención del niño. Y no sobrecargar el entorno. Para así mejorar la atención.
Para evitar la dispersión es aconsejable:
- Evitar que el niño juegue con varios juguetes a la vez. O realice varias tareas al mismo tiempo.
- Tener cuidado de no tener la televisión encendida mientras se realizan las tareas escolares.
- No permitir dejar al niño jugar mientras se come, se cena o se merienda. Debe estar sentado hasta que acabe y no se le debe permitir levantarse hasta que termine.
- Las tareas se empiezan y se acaban, no se dejan a medias.
- No mostrarle los errores de sus acciones.
A continuación se exponen juegos favorecedores del desarrollo de los procesos atencionales, es muy importante plantearle las actividades que se enumeran a continuación como un juego. Es recomendable realizar los juegos 1 ó 2 veces al día y durante un tiempo no superior a los 15 minutos. Le aclararemos las dudas sólo si está atento:
-
- Enumerar cosas que puede encontrar en casa y pedirle que las traiga para comprobar que ha atendido al listado.
- Decirle una palabra o un número. A continuación, recitar una lista de 3 palabras o números, entre los que se encuentre el que se le ha indicado y pedirle que levante el dedo cuando lo escuche.
- Colocar diferentes elementos en una mesa, en un orden determinado. Variar luego el orden para que vuelva a colocarlos en el modo inicial.
- Guardar varios objetos en una caja, cerrarla y pedirle que repita el nombre de todos los objetos que están en su interior.
- Disfrazarse con varios adornos y quitarse algunos para que descubra cuáles han desaparecido.
- Contar una historia, como por ejemplo: “Una tribu de indios van de caza. Se montan en los caballos y empiezan a cabalgar (damos palmadas sobre las rodillas, con ritmo).Suben a una montaña (ritmo más lento). Bajan (más rápido). Cruzan un puente de madera (damos palmadas en el pecho). Ven a los animales. Afilan las flechas (nos frotamos las manos abiertas). Cargan el arco. Tiran la flecha (ziiiuuuuuuu…..). Grito final de victoria”. Podemos repetir algunos elementos e inventar otros nuevos. El niño debe reproducir nuestros gestos y sonidos en el momento indicado.
- Hacer bolitas de plastilina y plantearle instrucciones como: aplasta la bola azul, rueda la bola amarilla
- Tenemos en la mesa de comer todos los utensilios, sin embargo falta algo y el niño debe descubrirlo y reponerlo
Mejorar atención y concentración niños desde casa
Tengo un niño de 8 años que mantiene la mirada cuando habla con otra persona, a pesar de su edad le a costado mucho aprender a leer. Es un niño muy inteligente, no es tímido, le gusta bailar y cantar. Pero cada vez es más notorio su mirada desviada cuando habla con otra personas. Es un niño muy sentimenental, lo que sucede en su entorno le afecta mucho. Quisiera saber que tipo de especialista lo puede evaluar.
Francis nuestro equipo de psicólogos podría verlo y valorar lo que está pasando. Podemos darte cita por teléfono 917599084.
Saludos
Equipo Vaca-Orgaz