En muchas ocasiones los padres se enfrentan a diversos comportamientos que presentan sus hijos los cuales llaman su atención, ¿será normal? ¿tendría que hacerlo? ¿debo de acudir a algún profesional? el lenguaje es el tema sobre el que más se cuestionan los progenitores.
El lenguaje es el mecanismo de comunicación el cual utilizamos para pedir, expresar y relacionarnos. Un retraso en el mismo afecta a diversas áreas: el niño se muestra más irascible, con problemas de relación social, se retrae y presenta una gran frustración. Psicológicamente el niño con dificultades en el lenguaje intenta comunicarse a su manera incluso empujando o pegando, no saben como hacerlo pero quieren comunicarse. Todas estas formas de actuación hace que en ocasiones las dificultades en el lenguaje en ocasiones lleven a confundirse con otras patologías.
Evolutivamente un niño presenta la explosión del lenguaje entorno a los 2 años de edad, pero….
¿Todos los niños son igual? ¿y si mi hijo es bilingüe?
No todos los niños arrancan a hablar a la misma edad y si manejan dos idiomas esta explosión se dilata en el tiempo.
Entonces ¿cuándo empiezo a preocuparme? ¿qué puedo hacer?
Siguiendo un protocolo como tal hasta los 4 años no es clínicamente significativo pero a nivel emocional y psicológico deberemos acudir a un profesional del lenguaje (psicólogo y logopeda) cuando la dificultad en el lenguaje afecta a la vida diaria del niño: tiene dificultades de relación, rabietas recurrentes o dificultades en la adquisición de los aprendizajes. A esto se le suma el hecho de tener en cuenta que los niños con dificultades en el lenguaje que no son estimulados presentarán una mayor probabildiad de tener problemas de lecto-escritura.
¿No es muy pequeño para recibir tratamiento? ¿y si me espero?
Cuando antes se estimule a un niño antes mejorará, además si se deja pasar el tiempo perderá la adquisición de otros aspectos o estos los aprenderá de manera inadecuada ya que la dificultad en cierto área determina o influye en el aprendizaje de otros aspectos. Las sesiones de estimulación a edades tempranas es lúdica, dinámica y adaptada al niño, en la que aprenden jugando y disfrutan de ello.
Belén Pozo
Psicóloga