Síndrome de nido vacío
No se considera un diagnóstico clínico en psicología. Es una etapa más en la vida de los padres, que tiene lugar cuándo después de haber convivido toda su vida con sus hijos en casa, estos se van, y se encuentran ellos solos. Llega el momento de tomar una decisión importante en la vida de la familia.
Este síndrome se caracteriza por una sensación de tristeza, anhelo, pérdida y dolor, siendo el síntoma principal una sensación de tristeza que puede llegar incluso a desencadenar en una depresión. Sentirse así forma parte de un cambio o crisis.
Este no tiene únicamente consecuencias negativas, si no que según estudios recientes se ha visto que un nido vacío puede llegar a reducir los conflictos familiares y laborales, y puede ofrecer a los padres algunos beneficios. Estos beneficios pueden ser tales como encontrar una nueva oportunidad para reencontrarse uno con el otro, mejor la calidad del matrimonio, así como reavivar los intereses comunes para los que antes no tenían tiempo.
A continuación vamos a dejar algunos consejas para afrontar de manera más adaptada este síndrome del nido vacío:
- Mantente en contacto: Se puede seguir manteniendo una relación cercana con los hijos aun que estos no vivan en la misma casa. Mantén el contacto regular mediante llamadas o visitas.
- Mantente ocupado: Invierte el tiempo que anteriormente dedicabas a estar con tus hijos en casa en algo que te motive. Busca una nueva afición o retoma una afición antigua que dejaste de lado por la maternidad /paternidad.
- Aceptar que la vida es una sucesión de etapas y que está es una de ellas.
- Intentar que la independencia de os hijos no coincida con ningún acontecimiento importante de la familia
- Fomentar las amistades
- Cuidar la relación de pareja
Lucía Ongil
Psicóloga
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