Miedo a hablar en público en niños. Claves.

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Parte I- Miedo a hablar en público en niños. Claves.

miedo a hablar en publico en niños

Hablar en público es uno de los retos escolares. Para muchos niños les resulta complicado de manejar y de enfrentarse en el aula. Este momento les genera miedo, vergüenza e incluso ansiedad. En el que muchos niños y adolescentes acaban evitando salir a exponer, leer en voz alta, levantar la mano o responder a las respuestas que los profesores formulan en clase.

Para muchos chicos las situaciones que conllevan hablar en público acaban siendo un suplicio. Debido a que les invade un profundo estado de temor y de vergüenza. Este a nivel cognitivo viene derivado de la anticipación de fallos, de imaginarse que van a hacer el ridículo. Y también de pensar en el posible bloqueo que puedan tener ante una lectura o exposición delante de los compañeros.

Ante estas situaciones, suelen aparecer asociados síntomas físicos a los que también llegan a temer y a anticipar. Como por ejemplo son la taquicardia, sudoración, sequedad bucal, tartamudez, rigidez corporal, dolor estomacal y náuseas, entre otros.

En cambio para otros chicos, estas situaciones no les supone ningún tipo de estrés ni nerviosismo. Sino que incluso, parece que se encuentran cómodos y tranquilos exponiendo cualquier trabajo oral, debate o proyecto en grupo. Esto puede verse influenciado por factores como el tipo de personalidad, el dominio de la expresión oral y el adecuado control y manejo emocional ante situaciones.

En algunos colegios,ya desde pequeños fomentan y enseñan a sus alumnos la asignatura de oratoria. Con esta asignatura, van entrenando al niño a que aprendan y a que desarrolle la habilidad de defender, expresar o debatir. Cualquier proyecto o ideas a nivel individual o en grupo, favoreciendo esta habilidad de cara a la adultez.

Si se va entrenando desde pequeño, se evitan problemas o dificultades en el futuro. Siendo para muchos adultos, el hablar en público una situación temida e incluso en algunos casos un tanto fóbica. Llegándoles a causar dificultades o problemas en el ámbito laboral y social, además de generarles un alto malestar emocional y una gran fuente de estrés.

Por todo ello,es recomendable que se fomente un entrenamiento y una exposición de esta habilidad comunicativa desde la infancia. Para que vayan perdiendo el miedo y la vergüenza desde pequeños. Además de dotarles de estrategias. De este modo, llegarán más preparados para las nuevas demandas educativas y mejorando su dominio oratorio en el futuro.

Rocío Delgado

Psicóloga Sanitaria