Tik Tok podría desarrollar tics en niños y adolescentes
Antes de comenzar con el artículo definiremos que es un tic. Es una conducta repetitiva, incontrolable e involutaria, bien motora o verbal, generalmente. Estos forman parte de una respuesta compensatoria de ansiedad. Los tics, para ser considerados como tal, deben de mantenerse en el tiempo y no pueden tener una intención voluntaria. Los sujetos que lo presentan en ocasiones no son conscientes de ello, y sobre todo no pueden controlarlo.
Una vez explicado qué es un tic, cabe destacar el nombre de un síndrome relacionado, Síndrome de Tourette. El cual en los últimos meses se ha visualizado mucho en las redes sociales. Muchos de los creadores de contenido de estas redes, concretamente de Tik Tok, en los últimos meses han llevado a cabo imitaciones de ello. Esta imitación se basa en realizar tics motores y verbales durante la grabación que suben a la red. Tics de carraspeos, parpadeos, sonidos involuntarios, palabras malsonantes y muecas extremas faciales, hechos que los adolescentes que lo visualizan repiten.
Al parecer hay un gran aumento de tics entre niños y adolescentes, ciertas fuentes comentan que puede ser tik tok la causa del problema.
Pero los tics que se visualizan en estas redes sociales no son los mismos que los de una persona que presente un síndrome de Tourette. Sino que forman parte de somatizaciones o conductas de imitación social, pero pueden llegar a convertirse en una problemática real. Estos comportamiento entrarían dentro de un trastorno de movimientos funcional. Lo que empieza en un juego puede convertirse en algo patológico. Ya que el cuerpo “aprende” a realizar estas conductas como forma de canalización de la ansiedad, produciéndose un condicionamiento, y puede convertirse en una pauta establecida. Además en ocasiones, los y las adolescentes que visualizan e imitan estas conductas, tienen de base una predisposición o un trastorno de neurodesarrollo leve, que les lleva a que se cronifiquen estos tipos de conducta. Lo que empieza como un juego puede acabar en una enfermedad.
Estos comportamientos, que forman parte del cuadro del síndrome de la Tourette, suelen comenzar de niños o ante fenómenos de ansiedad muy elevada, y suelen empeorar en la adolescencia, lo que lleva a veces, a que el adolescentes no quiera relacionarse y evite salir de casa.
No hemos de olvidar que la pandemia ha dejado muchos cuadros de ansiedad o depresión, y que estos trastornos favorecen el aumento de tics, como una forma de liberación del estrés o ansiedad. Diversos estudios han observado, con técnicas de neuroimagen, que ante una situación de estrés mantenida, se genera una mayor liberación de catecolaminas, las cuales están en la base de este tipo de comportamientos.
Una posible explicación podría estar en que ver durante horas a alguien que tiene tics puede acabar que sin querer el niño o adolescente los acabe copiando por imitación de manera inconsciente.
Por lo que se recomienda no pasar muchas horas viendo tik tok al mismo personaje con tics.
Cuanto más tiempo pase entre el inicio del tic y acudir a consulta para su tratamiento, peor será su posible recuperación. Y más tiempo llevará la misma. Ante la presencia de tics se debe acudir cuanto antes al psicólogo, lo que favorece que deje de hacerlos antes y la duración del tiempo en sesiones que tenga que acudir.
El profesional que estudia y que trata los tics, siempre será el psicólogo. Por lo que ante los mismos, consultar con el profesional puede ser lo más eficaz.