Psicología infantil: Mejorar la comunicación
En ocasiones el lenguaje no desarrolla según lo esperado por la edad cronológica del niño, ya no sólo el hecho de que hable sino de que se comunique, que use el lenguaje para interaccionar con el entorno, que mire a los ojos, que pida ayuda,… El primer paso ante estas circunstancias es acudir a un especialista infantil que determine si entra dentro del desarrollo o no así como los pasos a seguir.
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A continuación se presentan pautas para favorecer un mejor desarrollo del lenguaje y la comunicación:
-Hablarle de manera tranquila y despacio.
-Cantarle canciones.
-Reírse con él para que pueda identificar que es capaz de producir respuestas de alegría en los demás.
-Fomentar la interacción entre dos personas por medio de juegos de turnos o muecas que pueda imitar como sacar la lengua.
-Hablarle con un lenguaje habitual, con frases gramaticalmente correctas y palabras sencillas, y frases cortas.
-Acompañar éstas frases con gestos para facilitar su comprensión.
-Contarle historias usando libros, para que se vaya fijando en los personajes.
-Desarrollar la atención por los sonidos, por ejemplo, los ruidos de los coches, la ambulancia, la música o la gente en la calle. Conviene que aprendan a escucharlos para que los puedan diferenciar, además estamos favoreciendo su atención selectiva.
-Desarrollar los músculos implicados en el habla por medio de juegos como soplar, sacar la lengua, jugar con silbatos, hacer pompas de jabón…
-Imitar sus ruidos, gestos, muecas, repetir lo que diga…. con el fin de favorecer que también él aprenda a imitar.
-No nos debemos anticipar a lo que el niño nos quiera decir, debemos tener paciencia y esperar, por ejemplo si entramos en una tienda, y se interesa por algo, no debemos dárselo, debemos esperar a que se comunique, bien por medio de un sonido, o bien por que señale con el dedo.
-Ampliar sus frases, esperar a que se comunique y darle información de manera indirecta sobre cómo se deben de decir, si por ejemplo quiere una chuche y dice “chocolate”, se le puede responder: “Ah, quieres una chuche”.
-Hablarle mientras se realizan las actividades cotidianas, por ejemplo, cuando come ir nombrando los alimentos, cuando damos un paseo, cuando le bañamos…
Belén Pozo
Psicóloga Sanitaria
