Me preocupo por todo no lo puedo controlar
Es una frase muy común en consulta. Todos, a nivel psicológico tenemos una tendencia de personalidad. Y la preocupación forma parte de la ansiedad.
Como hemos explicado en artículos anteriores, la ansiedad forma parte de la expresión de las emociones y es necesaria para la supervivencia. Pero hoy vamos a hablar de las preocupaciones.
Todos nos preocupamos ¿verdad? Todos pensamos en qué va a pasar en nuestro futuro. Y la mente intenta buscar soluciones a estas preocupaciones.
Pero ¿cuándo empieza a suponer un problema las preocupaciones?
Las preocupaciones empiezan a ser un problema, cuando estas generan malestar en el sujeto. Bien porque son muy recurrentes o incontroladas o produce una activación fisiológica que conlleva sintomatología como la siguiente:
- Problemas para dormir
- Alteraciones en la alimentación
- Dificultad para tomar decisiones
- Problemas de atención
- Cambios en la vida diaria del sujeto
Las personas que tienen un nivel alto de preocupaciones son más inseguras. Tienen una mayor sensación de falta de control. Sienten que no pueden llegar a todo y esto les genera abatimiento y cansancio psicológico. El intentar controlar todo los lleva a sentir un gran descontrol. Y con ello una gran frustración.
Este tipo de personas interpretan la incertidumbre de manera negativa. Analizan las situaciones desde el punto de vista de la negatividad y sobre todo del miedo. Por lo que su pensamiento tiende a las generalidades, catastrofismos y polaridades. Todo ello debido a que el sujeto está en un estado de sobreactivación fisiológica. Su mente y su cuerpo están preparados para la lucha, por lo que hace que su mente busque elementos para combatir y evitar el daño. Esto lleva a que sólo se centre en lo negativo y lo neutro lo interprete de dicho modo.
Un aspecto muy importante que está en la base de las preocupaciones es que los sujetos interpretan lo probable como certero, y eso hace que todas las situaciones sean peligrosas para ellos. Saben que puede que no ocurra, pero a nivel inconsciente creen que seguro que pasará. Por lo que el sujeto intenta llevar a cabo acciones para evitar que ocurra.
Entonces cómo puedo controlar mis preocupaciones
Lamentablemente una de las maneras es intentar no controlar. Y sobre todo dividir las preocupaciones en ocupaciones. Es muy importante que el sujeto enumere las ocupaciones que tiene y llevarlas a cabo. Para poder modificar formas de interpretar el mundo el sujeto tiene que vivirlo. Es decir, hay que reformular las preocupaciones en ocupaciones para darse cuenta de que puede con ellas. Observar cómo las catástrofes que estaba en su mente no ocurre. Lo más importante para poder modificar la mente es que esta lo viva, que lo experimente.
Belén Pozo
Psicóloga Sanitaria