Cómo gestionar la frustración
La frustración es una respuesta emocional al incumplimiento de algo que teníamos voluntad que pasara. Esa voluntad va ligada a las expectativas. Pues nos sentimos más frustrados cuanto más expectativas teníamos sobre lo que queríamos que sucediera.
Las consecuencias de sentirse frustrado son la tristeza. También la desmotivación o abandono de nuestros propios objetivos. Todo ello puede limitarnos mucho.
Tolerancia a la frustración actualmente es algo muy importante. Es la capacidad de salir adelante, aunque algo no te haya salido. Actualmente en la época que vivimos la frustración es algo muy común. Ya que continuamente nos arriesgamos en muchos territorios. Ansiamos hacer de todo, innovar o probar cosas nuevas.
Lo más importante cuando llega esa frustración es aceptar que es parte de una vida compleja y rica. Significa que continuamente te estas estimulando y probando cosas nuevas. En resumen eso es algo muy bueno. Si no nos frustráramos significaría estancamiento, aburrimiento. La huida o procrastinación, la inacción no te llevará a nada.
Algunos síntomas que ayudan a detectarla frustración:
- En primer lugar, adicciones están muy ligadas a la frustración. Se intenta compensar con alguna adicción.
- También la culpa. O nos victimizamos o culpamos a otro. ¿Cuánta de responsabilidad tenemos nosotros en lo que avanzamos o no?
- Impulsividad. Cuando nos dejamos guiar por los impulsos y no por la razón.
¿Cómo gestionar la frustración?
- Aprender a reconocer la frustración y aceptarla. No enmascararla ni poner excusas. Que el ego no dependa de la perfección. Un fallo al final es eso, un fallo. No pasa nada si algo alguna vez sale mal.
- No victimizar ni culpabilizar. Persiste. El que persiste siempre progresa.
- No mirar sólo lo que no conseguimos. Abrir el foco también hacia aquellas cosas que sí has conseguido.
Sara Montealegre
Psicóloga
Estas son algunas ideas sobre cómo gestionar la frustración.
Lee otro artículo en: http://psicologoinfantil.es/psicologo-gestion-de-la-incertidumbre/
