Tomar decisiones
Tomar una decisión es elegir una estrategia para ejecutar una acción dentro de varias posibles.
Es decir, se nos plantean diferentes alternativas de las cuales debemos de elegir una. Pero además analizar y valorar hemos de ejecutar. El tomar una decisión requiere siempre ejecución, acción. Esto no es siempre fácil.
A veces nos generan bloqueos psicológicos. Ya que un componente importante al tomar decisiones es la incertidumbrea . La nos acompaña a lo largo de todo el día. Y la incertidumbre es incómoda para el ser humano. Porque genera inquietud, la cual nos puede llevar a patrones de ansiedad. Además los bloqueos, improvisación.
¿Qué dificulta el tomar decisiones?
- En primer lugar, falta de autoestima.
- Intolerancia a la incertidumbre. No están acostumbrados a tomar decisiones en la cual no hay garantía para saber que una decisión va a ser la correcta.
- Por último dificultad para actuar. Quedarse en el pensamiento.
3 Claves de la toma de decisiones
- Primero contexto de la decisión. Plano personal, profesional, experiencias previas en ese contexto o no.
- Situación que genera la acción. Si la situación sobre la que decidir es altamente impactante en tu vida te bloqueas más. Además, los aspectos cognitivos no entran tanto en juego porque prima la parte emocional.
- Características de la persona. La experiencia, la intuición, los valores, la capacidad lógica… A la hora de tomar decisiones que pueden entrar en conflicto con los valores personales que tenemos y que rigen de forma intrínseca nuestro comportamiento, no somos capaces de enfrentarnos a nuestros propios valores y aparece el bloqueo.
¿Qué podemos hacer?
- Aplicar la emoción. Muchas veces podemos verla como algo que nos puede frenar, pero guiarnos por emociones sanas nos ayudará a depurar la toma de decisiones que el propio campo cognitivo no nos va a ayudar a depurar.
- Propensión a la acción. Las personas con problemas no suelen estar arrepentidas de sus errores sino hartas de no tomar decisiones. Hay que recordar que cuando quieres cambiar algo no es pensarlo, sino hacerlo, cambiar. Lo que realmente paraliza es quedarse en lo cognitivo y en la rumiación, y conformarse con meditarlo, pero no pasar a la acción.
Arrepentirse de algo que has hecho porque las cosas no han salido como esperabas te lleva a un aprendizaje siempre. Pero la inacción lleva al inmovilismo y a la falta de crecimiento. En cualquier proceso del desarrollo personal el no tomar decisiones nos paraliza.
Sara Montealegre
Psicóloga
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