Etapas de la memoria y estrategias
La memoria se podría definir como:
“El proceso cognitivo a través del cual se codifica, almacena y recupera una información determinada. O un suceso concreto. Es el proceso psicológico que nos permite aprender”.
En primer lugar, cuando hablamos de memoria, no nos estamos refiriendo a un concepto unitario.
Por lo tanto, hay diferentes tipos de memoria. También, junto a las distintas clases de memoria existentes, mencionar que dentro de este proceso cognitivo existen diferentes etapas. Etapas o fases necesarias para la consolidación de la información y la recuperación de la misma cuando sea oportuno.
Las etapas de la memoria son tres:
- La codificación de la información.
- El almacenamiento de la misma.
- Y, finalmente, la recuperación.
En primer lugar, es recibir del exterior información. A través de nuestros sentidos, para la elaboración de percepciones y de sensaciones. Momento imprescindible para que pueda producirse un aprendizaje. Captados los estímulos, se ha de establecer una transformación en códigos de almacenamiento. Posteriormente para almacenar la información. No siempre este proceso es consciente. En muchas ocasiones, es inconsciente.
En segundo lugar, está la fase de consolidación. Se refiere al producto de elaborarse la información que ha sido codificada en un primer momento. ¿Para qué?. Para establecer un registro de la información permanente o eventual.
Finalmente, la fase de recuperación. Consiste en poder acceder y evocar esa información que ya previamente tenemos almacenada.
Los problemas en la memoria pueden ser debidos a déficits en la fase de registro, almacenamiento o fase de recuperación. Para poder facilitar y también mejorar el rendimiento en cada una de las fases enumeradas, pueden utilizarse diferentes estrategias.
Estas son estrategias que se utilizan para favorecer el proceso de codificación y de recuperación de la información:
- La repetición. No es la estrategia más eficaz ya que es una estrategia de elaboración de la información más superficial. Ejemplos a destacar:
El copiar, el repasar un tema de historia o la presentación que vamos a hacer en el trabajo. El subrayar o el repetir mentalmente la lección.
- La centralización. Para facilitar y acortar la cantidad de material que se ha de almacenar. Nos quedaremos con la información realmente relevante. Al sintetizar, al resumir y al simplificar dicho material, se facilita el aprendizaje. ¿Qué se puede hacer?. Primero, una lectura general del tema y después, obtener únicamente los datos importantes. Ejemplos a destacar, los esquemas y los resúmenes.
- La elaboración. Con esta estrategia, se asocia el material a almacenar, con información que ya dispone la persona y que es significativa. Ejemplos a destacar, las metáforas. También el establecer relaciones de semejanza entre diferentes conceptos o cosas.
Información obtenida de: Muñoz Marrón, E., y González Rodríguez, B. Estimulación cognitiva y rehabilitación neuropsicológica de la memoria. Universitat Oberta de Catalunya (FUOC). P09/80548/00293
Miriam Benavides
Psicóloga Sanitaria