Negación de la realidad
A veces, los profesionales de la psicología nos encontramos con padres que no quieren ver la realidad del problema de su hijo. Recuerdo hace muchos años, cuando empecé de una madre que bebía y negaba el retraso coginitvo de su hija de 6 años. Y os voy a decir una cosa, esa niña, era la niña más bonita del mundo. Es cierto que la costaba mucho aprender a leer, o escribir los números. Y que después de estar una semana para dibujar el número 1, a la siguiente es probable que se le hubiese olvidado. Pero era dulce, cariñosa, amable y tenía la sonrisa más bonita del mundo, siempre feliz. Una tristeza ver lo que la madre se estaba perdiendo.
Hace 3 años, un niño Asperger, de 7 años. Con unos importantes problemas para relacionarse, pero sin dificultad en el aprendizaje. Los padres sólo hablaban de lo listo que era su hijo, o rápido que aprendía. Pero sin amigos, sin sentir las emociones de los demás, sin empatía. Y los padres sin querer verlo, casi que culpaban a los demás de que su hijo estuviese “aislado”
Otro niño de 8 años, de nuevo un Asperger. Se sabe de memoria los números de los libros de la biblioteca del colegio. Donde pasa sólo sus recreos, en su mundo, sin apenas contacto ocular. Pero de nuevo, los padres insisten en que a su hijo, le cuesta algo relacionarse. Pero sin ver el alcance del problema.
Y así, todavía puedo recordar muchos otros padres. Que por un lado, es comprensible, es muy doloroso, lo entiendo, la mente les protege de ver algo que les dolería mucho, no es aposta, no es consciente. Pero un problema importante, es que este no ver, no ayuda a que su hijo reciba todas las ayudas que necesita para la estimulación más adecuada, para que esté lo más integrado posible en la sociedad, y para que sea feliz.
Aceptar a sus hijos cuanto antes es la mejor manera de ayudarles, la mejor terapia. Desde aquí deciros que tenéis unos hijos preciosos, divertidos, simpáticos, y que tienen unos grandes potenciales en muchas cosas, que juntos vamos a ir desarrollando, para que sean felices. ¿Nos ayudas?
Elisa Vaca
Psicólogo Infantil
