No puedo quedarme dormido
Los problemas de sueño son muy comunes en consulta. Dentro de estos problemas está el no poder quedarse dormido. “No puedo quedarme dormido”. Dificultades en la conciliación del sueño. En estos casos, las personas suelen intentar llevar a cabo acciones para la mejora del mismo. Pero muchas veces estos no surgen efecto.
Es cierto que la teoría casi todos nos la sabemos, pero por qué no funciona en la práctica. Y el sujeto sigue expresarme “No puedo quedarme dormido”.
Lo importante para que las pautas de higiene de sueño funcionen es determinar las causas de la dificultad para conciliar el sueño. Para que el sujeto pueda dejar de decir “No puedo quedarme dormido”. Algunas de las posibles causas de ello serían:
- Preocupaciones no canalizadas.
- Exceso de actividad física cercana a las horas de sueño
- Inadecuadas pautas de higiene del sueño
- Malas condiciones ambientales
Una vez detectadas las causas de la dificultad para quedarse dormido se podrá llevar a cabo la reeducación de los hábitos. Será el momento de poder comenzar a trabajar con el sujeto, para que todo lo puesto en marcha pueda funcionar. Para que las alteraciones que se producen en la vida del sujeto empiecen a desaparecer de su día a día. Es algo muy importante ya que los problemas de sueño suelen conllevar consecuencias que afectan a diferentes áreas de su vida. Estas pueden ser:
- Irascibilidad.
- Problemas de atención.
- Dolores de cabeza.
- Alteración en el estado de ánimo.
- Dolores de cabeza.
- Olvidos.
Por todo ello, es muy importante acudir a un profesional que determine el por qué de la alteración. Y se pueda elaborar un plan de acción personalizado para que sea efectivo y eficaz. Y que el sujeto pueda dejar de decir “No puedo quedarme dormido-“.
Belén Pozo
Psicóloga Sanitaria
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